La prostitución infantil en Los Cabos es un secreto a voces”, pero no hay secretos en donde hay tantos gritos, tanto descaro, tanta niñez descuartizada, tantas almas apagadas y tanta perpetración de crímenes que tienen un chingo de nombres, no hay manera.
En su columna sabatina, Bibiana Faulkner nos comparte un crudo relato sobre lo que había comenzado por ser un fin de semana en «Cabo» y terminó convirtiéndose en una crónica más de la impunidad y el cinismo con que se realiza la porstitución infantil en uno de los polos turísticos más importantes de México. Vale la pena compartirlo, pues proyecta un tema de suma delicadeza y que a su vez está relacionado con otras cuestiones de carácter continental como la trata de blancas y su relación con otros negocios ilícitos.
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